DESBLOQUEA TU ESCRITURA - EJERCICIO NO. 7 - CENTÍMETROS DE PIEL (EUCALIPTO SEGÚN ZÓCALO)
CENTÍMETROS
DE PIEL
1a
palabra: Eucalipto.
2a
palabra: Zócalo.
Preposición:
Según.
EUCALIPTO
SEGÚN ZÓCALO
Eugenio Calipto Sánchez, alias “Eucalipto”. Natural de San Martín de Ampurias (Gerona). Activo en el SECED* desde el 8 de Mayo de 1973 y posteriormente en el CESID** hasta su desaparición en Marzo de 1981. Condecorado con la orden del merito en dos ocasiones por su trabajo durante la transición y el golpe de estado del 23F. Paradero actual: desconocido.
Zoraida
Calero Lopez, alias “Zócalo”. Natural de Granada. Activa en el
CESED* desde Junio de 1973. Varios trabajos de documentación en las
bases americanas de Torrejón de Ardoz (Madrid) y Morón de la
frontera (Sevilla). Paradero actual: recluida en la sede central del
CESID** en disposición de ser interrogada, de la forma más brutal.
Extracto
del interrogatorio al agente Zócalo realizado el Lunes, 23 de Marzo
de 1981 en las instalaciones anteriormente indicadas:
–No
tenemos todo el día, Zócalo, así que es mejor que vayas
largando—dice el interrogador desde la penumbra, con distorsión en la voz.
La
única luz de la habitación viene del foco dirigido hacia ella. Está
amarrada a una silla. Hay otro hombre más del que solo se ven camisa
y pantalón blancos cuando se acerca a zurrarle.
–No
sé dónde está y no os lo diría, de todas formas. Creéis que soy
estupida. Lo cazaríais como perros—dice la mujer, tratando de
recuperarse de la última bofetada.
–Según
leo en el informe, fueron destinados a la misma unidad durante la
transición, antes de que huyera por primera vez. ¿Le comunicó sus
planes en alguna ocasión?–
–No tengo ni idea de lo que
habla. Pierde el tiempo conmigo—
El
de la camisa blanca se acerca y le arrea otra vez. Zócalo, aturdida,
tarda en contestar. Siente el dolor pero no lo rehuye.
–Nunca
dijo nada. Si quiere saber mi opinión, estaba hasta los huevos del
servicio de inteligencia. Al final, le importaba una mierda—
–Por
favor, Señorita López, no nos tome por tontos. Sabemos que fue en
la unidad donde se enamoraron—
Zocalo
se muerde el labio.
–No
sé a lo que se refiere—dice mientras aprieta la silla con más
fuerza.
–¿No?
Es curioso porque tengo aquí una carta que dice lo contrario. La
escribió usted cuando se esfumó. En ella dice textualmente “Querido
Eucalipto, te echo tanto de menos. ¿Cuándo vas a volver?”—
–Está
bien. Éramos amantes. Desapareció sin dejar rastro y no le ví
durante unos años— dice y clava sus ojos en el entrevistador.
–Pero
volvió, ¿no es cierto?—
–Sí –contesta
y hace una pausa– lo
hizo—
–¿Cuándo?—
La
mujer calla y baja la mirada hacia el lado. Su pómulo está
enrojecido. El torturador le cruza la cara y ella se pasa la lengua
por la zona del impacto.
–Estaba
destinada en Torrejón, en la base. Se hizo pasar por militar para
llegar hasta mí— dice Zócalo.
–¿Por
qué?—pregunta el hombre en la oscuridad. Aumenta la cadencia de su
respiración.
–Los
de contraespionaje me descubrieron. Dieron la orden de matarme pero
se las arregló para evitarlo—
–¿Y
después?—
–Nos
casamos—
–Pero
no duró mucho...—
–(Llora)
No. Fueron a por él. Llegué a casa una noche y se lo habían
llevado. Había señales de lucha, los cajones estaban abiertos, la
ropa por todos lados. Desapareció—
El
inquisidor calla. Instantes más tarde, mueve la cabeza de lado a
lado.
–Yo
creo que sí sabe dónde está. ¿No es cierto que ha comprado
recientemente billetes para Puerto Rico?—
–Hace
mucho que no me voy de vacaciones, agente—dice sonriendo.
–Yo
creo que va hacia allí. Usted lo sabe. ¡Díganoslo!—
–Déjeme
en paz. Ya no pienso en él, no puedo ni mirar las fotos que tengo en
casa –dice entre sollozos– No volverá—
–Dígame
algo, ¿sigue usted echando de menos a Eugenio? ¿le quiere?—
–Sí... –responde
y traga saliva– Joder, sí—
–Me
quiere—
El
hombre de la camisa blanca se vuelve hacia el interrogador.
–¿Dijo
usted “me quiere”?—pregunta al tiempo que desenfunda su arma y
apunta al que está en penumbra.
Es
demasiado tarde. Dos balazos, atenuados por el silenciador, acaban
con su vida. Eucalipto enciende la luz y encuentra a Zócalo,
que sonríe como si le perdonasen la vida . Entonces la desata y se
funden en un abrazo en el que apenas sobran centímetros de piel.
–Oh,
cariño, este es el mejor regalo de aniversario que me hiciste—
–Sabía
que el jueguecito de los espías te iba a poner—
*SECED:
El Servicio Central de Documentación fue un servicio de inteligencia
español durante el final del franquismo y el principio de la
transición (1972-1977). Fue reemplazado por el CESID.
**CESID:
El Centro Superior de Información de la Defensa fue una agencia de
inteligencia española que estuvo en funcionamiento desde 1977 hasta
2002.
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